Aportes de la fotografía publicitaria
Capturar la esencia de imágenes en la fotografía fue una de las grandes evoluciones del arte pues se suponía que los pintores eran los únicos que podían plasmarlas y representarlas. El nacimiento de la fotografía propone otra forma de arte que impresiona con su ineludible evolución, ahora es la cara que sostiene el cuerpo del creativo mundo de la publicidad.
La fotografía ha actuado como una forma de comunicación humana, y con ello, la publicidad ha creado multitud de marcas, miramos alrededor y vemos miles de imágenes, logos, marcas que nos acercan y nos refieren a un producto, una idea o un servicio.
José Manuel Susperregui sostiene que la naturaleza de la fotografía publicitaria parte fundamentalmente de su funcionalidad, que a diferencia de otros géneros, “le exige una adaptabilidad de los intereses comerciales que tiene por finalidad el aumento de las ventas o servicios” y es aquí donde se reúne los aportes de la fotografía publicitaria, pues está comprometida a aumentar el número de ventas o servicios.
Para lograr ese objetivo la fotografía publicitaria acude a la originalidad que supone la aportación de una imagen totalmente nueva. La estimación de la fotografía publicitaria debe tener presente dos supuestos conjuntamente: por un lado, la limitación creativa que supone la funcionalidad de la publicidad pero, por otro lado, también esta la exigencia de la originalidad para que esa funcionalidad se pueda imponer. Por lo tanto se pude puntualizar que su margen de creatividad puede ser amplio, aún a pesar de las restricciones de la funcionalidad.
En este sentido, el único límite del fotógrafo para alcanzar esa funcionalidad es la imaginación. El fotógrafo puede atreverse a construir imágenes recurriendo a todo tipo de técnicas y trucos, en contraste con los reporteros gráficos de prensa, que pueden ser acusados de manipuladores por el sólo hecho de ejercer algún control sobre sus fotos.
La fotografía publicitaria está dotada de un estatuto tolerante y abierto que acepta todo tipo de recursos con tal de que la imagen sea la idónea para el éxito de la campaña publicitaria. Uno de estos recursos es la estética con la que se desarrolla el trabajo de una imagen publicitaria que, además de expresar un mensaje directo y atractivo, debe estar construida con valores positivos de belleza. Esto, naturalmente es un conjunto de elementos que aporta a la fotografía la originalidad con el fin de conquistar la funcionalidad de la imagen publicitaria, a través del impacto visual.
Capturar la esencia de imágenes en la fotografía fue una de las grandes evoluciones del arte pues se suponía que los pintores eran los únicos que podían plasmarlas y representarlas. El nacimiento de la fotografía propone otra forma de arte que impresiona con su ineludible evolución, ahora es la cara que sostiene el cuerpo del creativo mundo de la publicidad.
La fotografía ha actuado como una forma de comunicación humana, y con ello, la publicidad ha creado multitud de marcas, miramos alrededor y vemos miles de imágenes, logos, marcas que nos acercan y nos refieren a un producto, una idea o un servicio.
José Manuel Susperregui sostiene que la naturaleza de la fotografía publicitaria parte fundamentalmente de su funcionalidad, que a diferencia de otros géneros, “le exige una adaptabilidad de los intereses comerciales que tiene por finalidad el aumento de las ventas o servicios” y es aquí donde se reúne los aportes de la fotografía publicitaria, pues está comprometida a aumentar el número de ventas o servicios.
Para lograr ese objetivo la fotografía publicitaria acude a la originalidad que supone la aportación de una imagen totalmente nueva. La estimación de la fotografía publicitaria debe tener presente dos supuestos conjuntamente: por un lado, la limitación creativa que supone la funcionalidad de la publicidad pero, por otro lado, también esta la exigencia de la originalidad para que esa funcionalidad se pueda imponer. Por lo tanto se pude puntualizar que su margen de creatividad puede ser amplio, aún a pesar de las restricciones de la funcionalidad.
En este sentido, el único límite del fotógrafo para alcanzar esa funcionalidad es la imaginación. El fotógrafo puede atreverse a construir imágenes recurriendo a todo tipo de técnicas y trucos, en contraste con los reporteros gráficos de prensa, que pueden ser acusados de manipuladores por el sólo hecho de ejercer algún control sobre sus fotos.
La fotografía publicitaria está dotada de un estatuto tolerante y abierto que acepta todo tipo de recursos con tal de que la imagen sea la idónea para el éxito de la campaña publicitaria. Uno de estos recursos es la estética con la que se desarrolla el trabajo de una imagen publicitaria que, además de expresar un mensaje directo y atractivo, debe estar construida con valores positivos de belleza. Esto, naturalmente es un conjunto de elementos que aporta a la fotografía la originalidad con el fin de conquistar la funcionalidad de la imagen publicitaria, a través del impacto visual.
a tiempo.L.G.
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ResponderBorrarmalisimo
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